Lectures amigues
26/04/2024
El control social y político pasa por el sentimiento de culpa, pero para aligerarla podemos culpar a un tercero malvado o en su caso al árbitro.

La culpabilidad como seres humanos individuales sobre lo que acontece a nuestro alrededor debería ser prácticamente nula. Como sociedad sería una manipulación , como nos quieren hacer entender a través de las redes y los medios de información.

La verdad real es que no podemos hacer nada más allá de nuestro círculo. Muy pocas personas pueden tener la capacidad de cambiar situaciones a nivel global y ello conlleva tener "poder".

El poder conlleva, tener información, dinero, influencia, que a su vez se consigue con escasa bondad y escrúpulos.

En el mundo animal, los mamíferos que poseen la suficiente inteligencia para poder socializar y comunicarse, ya existe el comportamiento manipulador . Nuestros ancestros, cuando aún ni siquiera teníamos un verdadero lenguaje ya manipulaban para obtener ventajas y alianzas.

Nuestra sociedad nos controla y nos hace sentir CULPA, por actos que se originan fuera de nuestra capacidad de intervención. PERO SÓLO SOMOS PEONES, en su tablero de ajedrez.

Somos actores de algo que no hemos creado. Protagonistas de una obra que no hemos escrito. Cada uno hace el juego que le ordenan, en un círculo vicioso, desde que tenemos consciencia del valor de las alianzas para conseguir objetivos. Nos incitan al odio o a la celebración como si estuviéramos en el Coliseo o de un partido de futbol de tratara. Pero sólo somos espectadores.

Los detentadores de poder, en las mal llamadas democracias, lo mantienen a través de los ciudadanos que votamos a sus representantes, políticos que, sin ningún pudor, nos desprecian, y somos la carne ce cañón para obtener réditos, sin importarles el dolor y traspasándonos la culpa.

Nosotros necesitamos creer en el mundo ideal y feliz, en la inmediatez o en algún momento antes o después de morir.

Para ello necesitamos chamanes, que nos hagan vivir un mundo mas comprensible y soportable, que nos convenzan mediante la religión, que ha sido a través de los tiempos, la norma de conducta en el derecho humano y divino, fuera de la cual solo había ostracismo y el propio demonio. La religión es y ha sido la mayor manipulación del cuerpo y del alma. Y la creadora del sentimiento de CULPA, para explotarnos en vida y proporcionarnos un mundo feliz una vez muertos.

La política no deja de ser una forma de religión a la moderna y a la antigua, porque la religión y la política han ido casi siempre de la mano, y han utilizado las mismas manipulaciones, haciéndose poseedoras del concepto del bien y del mal.

Los partidos políticos son la tapadera de los intereses de los poderosos, y como dice el dicho, “son los mismos perros con distintos collares”. Y desde luego la democracia interna de los mismos brilla por su ausencia, solo importa el sillón y donde aposentar el trasero.

Para ello es necesario la creación del enemigo externo, aunque este sea actual, o de hace 500 años y que nos impide ser perfectos o mejorables en la actualidad. Con ello explican las calamidades presentes. Incitan de manera descarada el odio al diferente, para que la crispación sea un arma política, un arma de guerra y de enfrentamiento. Con las guerras se han creado las grandes fortunas.

Uno de los principales argumentos para una guerra o para el odio, son los nacionalismos, que son excluyentes, como la religión y la política. Excluyen del cielo a todo aquel que este fuera o discrepe de su forma de vestir, hablar o de color. El romanticismo nacionalista no ha cambiado desde el siglo XIX, antes se luchaba por el rey o la religión y ahora en el romanticismo se incluye la patria.

El control social y político pasa por el sentimiento de culpa, pero para aligerarla podemos culpar a un tercero malvado o en su caso al árbitro.

Yo puedo mirar cerrando los ojos y siempre veo lo mismo.

Hipocresía. Manipulación a través de los medios haciéndonos sentir "culpa" o culpando a terceros cuando si deberíamos culparnos a nosotros mismos. Pero no hay Juez que pueda resolver esta ecuación.

¿Como puedo yo parar la guerra de Gaza?

¿Como puedo evitar el maltrato de las mujeres en Afganistán?

Y así podríamos hacer una lista interminable.

Yo solo pretendo poder interactuar con el pequeño mundo que me rodea y elucubrar sobre las posibles soluciones.

Me gustaría que las religiones no fueran tan creíbles en su letra, pero podría quitar la esperanza de un mundo mejor para los humanos que necesitan ayuda para poder soportar du realidad.

Borraría del mapa las naciones y las fronteras, no entiendo cómo podemos considerar "delincuentes", aquellos que huyen de la guerra o la miseria o simplemente buscan una situación mejor.

Consideraría "delincuentes" a los nacionalismos que crean fronteras, odios y enemigos a otros seres humanos.

Eliminaría a los políticos, con sus discursos infumables y a sus partidos que sólo buscan el voto en su propio beneficio.

Yo no puedo hacer nada, solo cuidar a mis seres querido.

¿podemos cambiar a través de una revolución?

Es verdad hemos cambiado y, muchas revoluciones han cambiado el mundo y otras lo cambiarán.  Pero me pregunto en realidad hemos cambiado nuestra forma de manipular y de poder desde antes de que conociéramos nuestra propia historia.

Culpa y mirar para el otro lado. Yo veo todo, aunque estuviera ciega.

LUISA INFANTE LOPE